¿Por qué tiene pesadillas?

Los sueños malos arruinan el descanso nocturno y le hacen sentir ansioso, asustado y enojado después de despertarse. Como resultado, durante el día el bienestar y la capacidad de trabajo se deterioran. En particular, esto se aplica a las personas que creen que los sueños pueden hacerse realidad en un futuro próximo. Vale la pena descubrir por qué tiene pesadillas y cómo recuperar la paz y el descanso completo por la noche.


Causas de los sueños terribles: ¿a qué prestar atención?

Las experiencias negativas hacen que una persona se despierte en medio de la noche. Los despertares van acompañados de ansiedad, ira, miedo y culpa. Además, las emociones fuertes pueden provocar lágrimas y pánico. Estas experiencias se intensifican cuando una persona tiene sueños terribles con regularidad. Como resultado, el descanso no permite recuperar fuerzas después de un día ajetreado y activo.

Visiones llenas de experiencias negativas e historias que asustan a una persona ocurren durante las fases del sueño REM. A medida que se acerca la mañana, se vuelven bastante largos. Por lo tanto, las pesadillas normalmente hay que verlas poco antes de despertarse. Las tramas, diálogos y acciones en los malos sueños dependen de muchos factores. Están estrechamente relacionados con el estilo de vida, la condición física y emocional de una persona.

Al considerar por qué se sueñan las pesadillas, se deben identificar las siguientes razones:

  • Experimentos estrés, ansiedad y fatiga crónica. Durante la relajación, una persona no controla la influencia de las emociones negativas. Por tanto, provocan malos sueños, en los que suelen repetirse escenas de la vida real.
  • Trastorno de estrés postraumático. La mayoría de los supervivientes de PTSD sufren pesadillas. Durante el descanso nocturno hay que volver a sumergirse en el suceso traumático y todo lo relacionado con él.
  • Condiciones causadas por la fisiología. Una de las causas más comunes de las pesadillas es la apnea, que se caracteriza por episodios breves de respiración interrumpida. También cabe mencionar la narcolepsia. Se trata de una enfermedad del sistema nervioso central, que se manifiesta por alteraciones emocionales al despertar, somnolencia diurna intensa, etc. Aumenta el riesgo de sufrir convulsiones y síndrome de piernas inquietas, que impide la relajación. Además, la probabilidad de tener pesadillas aumenta si una persona sufre de temperatura corporal elevada, intoxicación característica de la intoxicación alimentaria y enfermedades virales e infecciosas.
  • Uso de medicamentos. Los antidepresivos, los betabloqueantes y los fármacos para el tratamiento de enfermedades neurológicas provocan trastornos del sueño acompañados de terrores nocturnos. Además, se observa un aumento de la ansiedad después de suspender el uso de pastillas para dormir.
  • Malos hábitos. El abuso de alcohol y sustancias psicoactivas provoca graves trastornos del sueño.


El problema también puede estar relacionado con la incomodidad constante causada por un lugar incómodo para dormir, una temperatura del aire demasiado alta en la habitación y ruidos extraños. Comer en exceso en la cena aumenta el riesgo de tener pesadillas. Ver películas o noticias con un tinte emocional negativo también puede causar un problema. El estrés psicológico conduce a una reducción significativa en la duración de las fases del sueño profundo, por lo que la persona se siente débil, irritable y mareada al despertar.

Si una persona tiene pesadillas con regularidad, qué hacer en este caso depende de su estilo de vida. Los hábitos saludables cotidianos ayudan a mejorar la calidad del descanso nocturno. Su lista incluye:

  • rechazo de grandes porciones de alimentos, en particular demasiado grasos, picantes y dulces, al menos 2-3 horas antes de su introducción;
  • limitar el uso de un teléfono inteligente, televisión o computadora por la noche;
  • mantener un horario de sueño saludable: es necesario descansar al menos 7-8 horas al día;
  • rechazo de un esfuerzo físico significativo.

También debes cuidar tu propia comodidad. La cama, colchón, ropa de cama y almohada deben ser de buena calidad. Debes elegir todo lo que necesitas para dormir teniendo en cuenta las características anatómicas del cuerpo. Por ejemplo, en presencia de enfermedades del sistema musculoesquelético, es posible que se necesite un colchón y una almohada con propiedades ortopédicas.

Antes de acostarse, conviene abstenerse de ver películas dramáticas, noticias y leer libros con una trama psicológicamente intensa. Es necesario ventilar la habitación aproximadamente una hora antes del descanso nocturno. Si es posible, vale la pena tomarse un tiempo para dar un paseo al aire libre.

En presencia de pesadillas periódicas que no cesan incluso después de seguir las recomendaciones dadas y que van acompañadas de ansiedad, miedo, agresión, apatía, es necesario consultar a un médico.