¿En qué fase del sueño ocurren los sueños?

Los somnólogos recomiendan dormir entre 6 y 9 horas para un descanso completo, una correcta recuperación del organismo y el mantenimiento de un excelente bienestar. Estas cifras no son casuales. Son el resultado del estudio del sueño como uno de los procesos más importantes en la vida humana. La importancia de un descanso pleno es difícil de sobrestimar.


Un sueño óptimo y saludable ayuda al cerebro a reiniciarse, fortalece el sistema inmunológico y normaliza el estado psicoemocional. Alterarlo es fácil, pero las consecuencias negativas, como la ansiedad, la irritabilidad y el deterioro del bienestar general, no tardarán en aparecer. ¿Qué son las fases del descanso nocturno, cuál es la importancia de los sueños lúcidos y cómo mantener la energía y el buen ánimo gracias a un horario adecuado?


Fases del sueño y sus características

El sueño debe ser de calidad para que el organismo logre un descanso y una recuperación por completo. Consta de dos fases que se alternan aproximadamente entre 5 y 7 veces por noche. Esta es la norma, cuya ausencia provoca que la persona se sienta lenta, apática y fatigada durante el día. La opción ideal son 5 ciclos (alternancia entre la fase lenta y la rápida).


El sueño humano incluye los siguientes procesos:

  • Adormecimiento. Es la preparación del organismo para el descanso que se manifiesta como el deseo de bostezar con frecuencia y la sensación de párpados pesados. Este es el momento perfecto para irse a dormir. El organismo envía una señal de que está listo. Los procesos biológicos se ralentizan y la sensibilidad disminuye. Normalmente, esta etapa dura entre 10 y 20 minutos.
  • Fase lenta. Es la etapa más prolongada del ciclo (aproximadamente el 75% del tiempo). Se divide en tres fases: somnolencia, sueño ligero y sueño profundo. Durante este tiempo, el organismo se recupera. Primero, la persona experimenta somnolencia (durante aproximadamente 10 minutos), luego entra en la fase ligera (20-25 minutos), donde la conciencia se desconecta, pero la audición sigue activa, y finalmente, el sueño profundo (alrededor de 90 minutos). En esta última etapa, se activan los procesos clave de recuperación del organismo. A veces, las personas sueñan en esta fase, pero esos sueños no se retienen en la memoria.
  • Fase rápida. Ocupa aproximadamente el 25% del tiempo de sueño. Durante esta fase, se procesa la información recibida durante el día y la actividad del organismo aumenta. La persona experimenta sueños vívidos o lúcidos que se retienen en la memoria.

Según los científicos, los sueños nocturnos son el resultado del trabajo del subconsciente. Pueden revelar mucho sobre el estado fisiológico de una persona, mientras que su ausencia es una señal de alerta sobre alteraciones que ocurren en el organismo.

Beneficios de un sueño saludable

Al comprender en qué fase del sueño ocurren los sueños, es importante entender los beneficios prácticos de este estado fisiológico. Un descanso completo es esencial para el funcionamiento normal del cuerpo humano. Sus ventajas incluyen:

  • Mejora de las habilidades de aprendizaje.
  • Reducción del riesgo de desarrollar demencia.
  • Manejo cómodo de las emociones.
  • Perfeccionamiento de habilidades prácticas.
  • Superación de miedos.

La naturaleza de los sueños sigue siendo un fenómeno no completamente estudiado. Sin embargo, se sabe con certeza que son beneficiosos para la salud y se consideran uno de los principales criterios para el funcionamiento normal del organismo.


¿Son importantes los sueños para el ser humano?

Las vívidas y coloridas tramas que llegan a la persona en forma de sueños son el resultado del procesamiento de la información obtenida durante el día. Es difícil sobreestimar la importancia de los sueños para la salud psicológica y mental de la persona. En la fase de sueño profundo, surge la inspiración, aparecen ideas para resolver situaciones difíciles de la vida, y como resultado, se armoniza el estado emocional.


Un régimen incorrecto como la falta de descanso adecuado y la actividad nocturna provocan diversas alteraciones en los procesos fisiológicos del cuerpo. Una de las situaciones más graves para la salud psicológica de la persona es una fase demasiado corta de sueño rápido o profundo, la ausencia de sueños. Esta situación puede convertirse en la causa de agotamiento mental e irritabilidad.


¿Qué hacer si no hay un sueño profundo? A menudo, la causa radica en la falta de una preparación adecuada para el descanso por lo que para ello se necesita:

  • Cuidar el lugar de descanso. Esto no solo incluye una cama cómoda, sino también un colchón de calidad, así como una almohada y una manta que envuelvan agradablemente el cuerpo.
  • Crear un ambiente favorable en la habitación. Ventilar el espacio antes de dormir, apagar cualquier fuente de luz para que esté oscuro dentro.
  • Preparar adecuadamente el organismo. Evitar el uso de dispositivos electrónicos y la televisión antes de dormir, leer un libro con una trama relajante o simplemente pensar en algo que traiga paz.

Una rutina diaria de acciones simples y comunes ayudará a volver a un descanso de calidad con sueños. Esto permitirá restaurar la salud psicológica y evitar la fatiga crónica.

Sueños lúcidos y su importancia para el ser humano

Trabajar en los miedos y deshacerse de los estados de ansiedad es una oportunidad que aparece en la etapa del sueño lúcido. Los científicos aún no han logrado determinar la causa exacta de este proceso fisiológico. Sin embargo, se sabe que el sueño lúcido es un estado especial del organismo en el que la persona se siente dormida, pero puede controlar el escenario del sueño. Es fácil diferenciarlo del sueño común. La persona dormida percibe todos los sonidos que la rodean.


Con mayor frecuencia, las personas tienen sueños controlados de manera accidental. Sin embargo, se puede aprender a entrar en este estado. Basta con construir el escenario deseado. Vivirlo ayuda a cambiar la forma de ver ciertos fenómenos y eventos en la vida real.


El sueño es un proceso fisiológico sorprendente, complejo e importante para el ser humano. Su alteración se debe a un régimen incorrecto y la falta de un descanso nocturno adecuado. Es importante evitar tales situaciones, ya que está en juego la salud psicológica y el equilibrio emocional.